Mario ansiaba estar acompañado. Para extrañar el placer de estar solo.
jueves, 23 de julio de 2015
miércoles, 8 de julio de 2015
Sombras en la noche (CXL)
En la penumbra de la soledad Mario recordaba irritado a todas las bellas mujeres a las que sonriendo como un bobo había dejado escapar sin haber hecho siquiera acto de presencia dirigiéndoles la palabra.
Mario dio mil y un puñetes a la almohada. Uno por cada oportunidad desperdiciada, por cada dona que no osó besar.
Mario dio mil y un puñetes a la almohada. Uno por cada oportunidad desperdiciada, por cada dona que no osó besar.
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