lunes, 7 de octubre de 2013

Sombras en la noche (CVI)

Salió Mario de la pieza que le mantuvo enclaustrado.

Se paseaba solari cuando vio pasar a una bella mujer. Siguió caminando hasta que reparó en que estaba a punto de perderla Dios sabe si para nunca.

Se paró a hablarle; a ella le agradaba su discurso y compañía. Pero Mario por un segundo miró a sus ojos y vio o quizá quiso ver un interés mayor.

Estaba convencido.

Con cara, voz y sobre todo mirada de galán le sugirió: "¿te importaría ser mi amante?"